domingo, 14 de agosto de 2016

Mañana de domingo

Las mañanas de domingo son mis preferidas...también las de mis hijos.
Cuando los mayores aún vivían conmigo. Primero Juan iba a comprar el diario. Pasado el rato, nos desparramábamos en los almohadones de la casa, cada uno con una parte del diario.


Si algo aprendí de mis gatos es el disfrute de estar. De hecho, estoy convencida que reencarnar en gato debe ser el escalón más alto de alcanzar.


Las mañanas de domingo son las más lindas.
Hasta luego...me voy a seguir disfrutando.  

No hay comentarios.:

Publicar un comentario