lunes, 31 de octubre de 2016

Poemas de mujeres o acerca de la poesía en la mañana

Es temprano y tomo mi té mientras me preparo para ir al centro, que no es poco.
Pero como hace varios días que no escribo nada y no sé bien cuáles son los caminos misteriosos de llevar un blog, les dejo un puñado de poemas de mujeres poetas ...o poetas mujeres, ustedes elijan.


 Ellos tenían siempre la cosecha más roja, la uva centelleante...

Ellos tenían siempre la cosecha más roja, la uva centelleante.
A veces, al mediodía, cuando el sol embriaga -si no, nunca
nos atreviéramos-, mi madre y yo, tomadas de la mano,
íbamos por los senderos de la huerta, hasta pasar la línea
casi invisible, hasta la vid de los monjes. La uva erguía 
bien alto su farol de granos; cada grano era como un rubí 
sin facetas con una centella dentro.
 

Ellos estaban aquí y allá 
con las sayas negras o rojas, y parecían escudriñar diminutas
estampillas, grandes láminas, o meditar profundamente sobre
el Santo de esos lugares. A nuestro rumor alguno dirigía
hasta nosotras la mirada como una flecha de oro o de plata.
Y nosotras huíamos sin volvernos, temblando bajo 
el inmenso sol.


De "Historial de las violetas" 1965
Marosa di Giorgio




Educada en el vicio de los hombres

voy a la cocina y me siguen
voy al baño y golpean la puerta
me despiertan en la noche para preguntarme si duermo
llaman por teléfono en todas mis ciudades
para avisarme cuidado con el vino y la vida literaria
no he perdido padre ni tíos ni ahijado ni amigos de juventud
por no perder no he perdido ni editor
ni ese hombre
que ya sombra aún cuida mi paso en las esquinas

no me han dejado caer de su mano de su vicio
de su peso de mi corazón


Juana Bignozzi
 De "La ley tu ley" 2000




En otra vida yo miraba desde la ventana de un bar...

en otra vida yo miraba desde la ventana de un bar
cómo la tormenta aplastaba las flores azules contra los cordones
contra las paredes
y por ese momento único de la juventud que dura muy poco
supe que nunca olvidaría esa escena en que nada aparecía
de lo que amaba me interesaba o temía




ni novios ni odios ni otros poetas ni revistas de opinión ni
secretarios de barrio ni amigos imbuidos de una colonizada cultura pavesiana
sólo las flores azules y la lluvia
recuerdo el nombre del pueblo la hora y esa lluvia
que nunca en las décadas que siguieron confundí con alguna otra 


Juana Bignozzi
De "La ley tu ley" 2000





Cuando compre un espejo para el baño...

Cuando compre un espejo para el baño
voy a verme la cara
voy a verme
pues qué otra manera hay decíme
qué otra manera de saber quién soy.
Cada vez que desprenda la cabeza
del fárrago de libros y de hojas
y que la lleve hueca atiborrada
y la deje en reposo allí un momento
la miraré a los ojos con un poco
de ansiedad de curiosidad de miedo


o sólo con cansancio con hastío
con la vieja amistad correspondiente
o atenta y seriamente mirarme
como esa extraña vez-mis once años-
y me diré mirá ahí estás
seguro
pensaré no me gusta o pensaré
que esa cara fue la única posible
y me diré esa soy yo ésa es idea
y le sonreiré dándome ánimos.


 Idea Vilariño




Anillos de ceniza

                                                         A Cristina Campo 

Son mis voces cantando
para que no canten ellos,
los amordazados grismente en el alba,
los vestidos de pájaro desolado en la lluvia.


Hay, en la espera,
un rumor a lila rompiéndose.
Y hay, cuando viene el día,
una partición de sol en pequeños soles negros.
Y cuando es de noche, siempre,
una tribu de palabras mutiladas
busca asilo en mi garganta
para que no canten ellos,
los funestos, los dueños del silencio.

Alejandra Pizarnik







2 comentarios:

  1. Hermosa selección de poetas y poemas!

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Gracias, Nanda! Y mil disculpas por la tardanza en la respuesta...gracias, me alegro te gusten

      Borrar